El complejo de Superman, característico de algunos jóvenes que consideran que a ellos nos les pasa nada, es causa de la falta de límites y cuidado para el uso desmedido de los reproductores de sonido.
· Las personas que están expuestas constantemente al ruido, en cinco años, su audición es equiparable a una persona de 60-70 años, señalan investigadores que buscan crear una cultura en salud auditiva.
por Maru Molina
México D. F., a 20 de junio de 2014 (Agencia Informativa CONACYT).- La sordera es un estado de incapacidad que afecta en diferentes niveles la audición. Se presenta desde grados leves hasta muy profundos. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (oms), en 2004, había más de 275 millones de personas en el mundo con este padecimiento.
Existen tres causas principales de sordera: genéticas, hereditarias y adquiridas. Las causas genéticas son aquellas que se presentan por problemas durante el embarazo o en el momento del parto. Por ejemplo, cuando la madre en la etapa gestacional se infecta de rubéola, sarampión, hepatitis o citomegalovirus (de la familia del herpes).
“La sordera genética también puede manifestarse cuando el recién nacido tiene bajo peso al nacer; sufre ventilación mecánica por más de cinco días; se le administra medicamentos nocivos para el oído (llamados ototóxicos), o su calificación Apgar es baja” asegura el químico Jorge Canto Herrera, del Centro de Investigaciones Regionales “Dr. Hideyo Noguchi”, de la Universidad Autónoma de Yucatán.
Actualmente, el químico Jorge Canto Herrera y un grupo de investigadores realizan un macro proyecto de detección, diagnóstico y seguimiento de las sorderas en la península de Yucatán. Participan la Universidad Autónoma de Yucatán, el Hospital Universitario Ramón y Cajal (Madrid) y la Universidad Norteamericana de Florida.
Causa hereditaria
La discapacidad auditiva puede ser por herencia de uno de los padres, de ambos progenitores o de algún familiar cercano.
Causa adquirida
Este tipo de sordera se puede presentar a cualquier edad y es multifactorial. El uso de antibióticos del grupo de las penicilinas puede ser un factor de riesgo, por ejemplo, la kanamicina se utiliza para evitar infecciones, pero su administración debe ser controlada. En el estado de Campeche se detectó a un grupo de niños con disminución de la audición por administración prolongada de antibióticos ototóxicos del tipo de gentamicina, la automedicación con antibióticos, es una práctica peligrosa que puede generar problemas de audición.
Escuchar la música a todo volumen así como exponerse a ruidos muy intensos y excesivos son elementos que están afectando a jóvenes. Los seres humanos podemos percibir el sonido entre los 20 y 30 decibeles dB, (medida del sonido); sin embargo, en un centro nocturno o partido de futbol se llegan a registrar hasta 130 dB. El complejo de Superman, característico de algunos jóvenes que consideran que a ellos nos les pasa nada, es causa de la falta de límites y cuidado para el uso desmedido de los reproductores de sonido.
De manera natural, alrededor de los 30 años comienza haber un deterioro de la audición, de uno a tres decibeles. Pero las personas que están expuestas constantemente al ruido, en cinco años, su audición es equiparable a una persona de 60-70 años. Maestras de escuela, trabajadores de fábricas, jóvenes que laboran en “antros”, repartidores en moto de comida rápida, policías de crucero; entre otros, están expuestos laboralmente a ruidos constantes que superan los 80 dB.
“Un grupo importante de personas expuestas a ruido lo constituyen nuestros jóvenes (entre 14 y 19 años) quienes “abusan” del uso de sus reproductores de audio colocados casi permanentemente al oído. Además, de manera importante, incrementan su exposición al ruido cuando asisten a salas de cine con sistemas Dolby (90-100 dB), o en sus idas semanales al “antro”; estos factores representan un mayor riesgo ya que la perdida de la agudeza auditiva podría presentarse antes, entre los 30 y 40 años”, asegura el investigador Canto Herrera. Los golpes craneoencefálicos también forman parte de las causas adquiridas.
La Organización Mundial de la Salud establece como medidas de prevención:
* Vacunar a los niños contra las enfermedades propias de la infancia, en particular contra el sarampión, la meningitis, la rubéola y la parotiditis.
* Aplicar la vacuna contra la rubéola a las mujeres adolescentes y en edad de procrear antes de que se embaracen.
* Efectuar pruebas de detección de enfermedades de transmisión sexual (TES) y otras infecciones en mujeres embarazadas.
* Mejorar la atención prenatal y perinatal, en particular mediante la promoción de los partos sin riesgos.
* Evitar el uso de medicamentos ototóxicos a menos que sean indicados bajo estricta vigilancia médica.
* Remitir, para su evaluación y tratamiento, a los recién nacidos que presenten antecedentes familiares de sordera, meningitis, peso bajo al nacer o que hayan sufrido asfixia durante el parto. El sistema de salud Mexicano, obliga a los hospitales públicos a efectuar el Tamiz Auditivo Neonatal.
* Disminuir la exposición (por motivos de trabajo o personales) a los sonidos y ruidos excesivamente altos. Usar protección en sitios ruidosos, (uso de tapones para ruido “plugs”).