Seminario virtual | Bienestar, Género y Resiliencia

Seminario virtual:
Bienestar: Salud, Género y Resiliencia.

27 abril, 2023, 17:00 horas Pacifico

Ponentes:

• Diana Cruz, Creadora Digital
• Silke de la Parra, Consultora
• Job Monobe, Médico y coach de vida
• José María Ramos, Profesor, DEAP, El Colef y CASEDE.

Objetivos:
1. Promover una agenda de bienestar integral con perspectiva de género en el contexto de los efectos socioemocionales y de salud general, producidos tras la pandemia del COVID-19.
2. Fortalecer la gestión de la resiliencia personal, emocional, social y gubernamental, con una perspectiva de creación de valor (Moore, 2011) y que genere bienestar mental, físico, emocional y profesional.

Contexto:
La importancia del seminario virtual radica en promover una discusión interdisciplinaria de la gestión integral del bienestar: física, mental, emocional, nutricional, social y laboral, con la finalidad de incidir en la creación de valor personal, organizacional e institucional (Moore, 2011). La salud y el bienestar emocional se refieren no solo a promover una actitud positiva, sino también a promover capacidades que incentiven la proactividad, el talento, la creatividad y la resiliencia para promover impactos personales, sociales, profesionales e institucionales en condiciones complejas y de incertidumbre. Acorde con la Secretaría de Salud (2023) en México fallecieron 330, 695 mil personas de marzo de 2020 a diciembre de 2022 por el COVID-19. La mayor parte de las personas fallecidas tenían problemas de hipertensión (44%), diabetes (36%), obesidad (20%) y tabaquismo (7.4).El rango de edad fue de 50 a 79 años, predominando en un 62% varones y el 28% mujeres. Estos problemas se han agudizado por la pos pandemia del COVID-19, y si se adicionan los efectos del cambio climático, urbanización, deforestación, escasez de agua, se impactará en la calidad de vida y en una mayor vulnerabilidad personal y social. Con lo cual han aumentado las desigualdades sociales y las vulnerabilidades personales.

Acorde con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos (2023), existe evidencias científicas de que los comportamientos saludables, previenen el cáncer, la diabetes, las enfermedades cardíacas, y el riesgo de deterioro cognitivo. El COVID-19 generó una crisis socioeconómica y de salud sin precedentes en América Latina, por lo cual el Banco Mundial (2022) ha propuesto promover una política de resiliencia de los sistemas de salud, con énfasis en una atención primaria en salud (APS) centrada en las personas. Lo cual también implica impulsar estrategias de longevidad saludable (Banco Mundial, ibídem).

Los efectos crónicos de la pandemia pueden generar actitudes de violencia en las personas afectadas en su entorno familiar y social; y de quienes cuidan a las personas con alguna vulnerabilidad. De ahí la relevancia de promover acciones preventivas para evitar las actitudes de violencia física, emocional y psicológica. La conexión social, asociada con una mejor alimentación y desarrollo de actividades físicas mejoran la calidad de vida personal: contribuyen a un índice de masa corporal saludable, se controla el azúcar en la sangre, disminuyen la mortalidad cardiovascular y los síntomas depresivos, y mejora la salud mental en general. Las dietas bajas en grasas y ricas en antioxidantes pueden reducir significativamente la aparición de deterioro cognitivo (Eskaton.org, 2023). Según Yuval Noah (2018) dos habilidades asociadas a un proceso de autoconocimiento serán determinantes para el Siglo XXI: la estabilidad mental y la inteligencia emocional, que inciden en el talento, creatividad e innovación, tanto tecnológica o digital, es decir en capacidades personales y laborales. El desafío personal es de qué manera las personas con déficits de salud y nutrición pueden ver limitadas sus capacidades mentales y creativas para generar valor.

Una propuesta para mejorar las capacidades humanas es el fortalecimiento de la neurogenesis. De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el cerebro puede cambiar con los daños y con malos hábitos, pero también tiene la capacidad de regenerarse, de crear nuevos puentes y tejidos neuronales, que permiten un mejor desarrollo mental y creatividad. La regeneración de nuevas neuronas permite evitar o prevenir enfermedades neurodegenerativas, para lo cual es necesario adoptar una actitud proactiva que estimule la capacidad natural cerebral. La gestión de la neurogenesis se incentiva mediante cinco hábitos: 1) ejercicio físico, 2) alimentación saludable, 3) ejercer sexualidad 4), mantener la mente activa y 5) gestión del estrés bajo control. El aporte de la gestión de las emociones (Cury, 2022) radica en incentivar actitudes proactivas, resilientes y de creación de diversas opciones de valor y que promueven las habilidades intelectuales, personales y profesionales, mejorando el desempeño profesional, personal, social y organizacional.

Cuestiones de análisis:

• ¿Cuál es la vigencia del debate actual y futuro sobre la gestión integral del bienestar (Wellness) según los efectos de la pos pandemia del COVID-19?
• ¿De qué manera los déficits de salud emocional, física, mental y nutricional repercuten en actitudes de violencia personal y en general en el bienestar?
• ¿Cómo se incentiva y gestiona la resiliencia mental, física, nutricional e intelectual generando la creación de diversos valores personales?
• ¿Cuál es el aporte de la neurogenesis para mejorar el bienestar mental, físico y laboral?
• ¿Cuál es la importancia de gestionar iniciativas de ecosistemas de salud para mejorar la resiliencia institucional y personal en el contexto de los efectos de la pos pandemia (hipertensión, diabetes, obesidad y tabaquismo) y en el deterioro cognitivo?