Para los residentes de las conurbaciones binacionales entre México y Estados Unidos es ampliamente conocida la existencia de interacciones transfronterizas, en los ámbitos económico, social, cultural, etc. La magnitud de las interacciones está en función del tamaño poblacional de las mismas y la diversidad de actividades económicas y sociales existentes. El par binacional de Ciudad Juárez, Chihuahua y El Paso, Texas, está conformado por 2,3 millones de personas (Censo 2020; CONAPO 2020), que lo coloca como la segunda conurbación más grande en la frontera México-Estados Unidos. Además, presenta una fuerte interacción transfronteriza en sectores como la industria maquiladora, el comercio transfronterizo, el turismo, etc. Lo anterior, se demuestra con las estadísticas de cruces diarios en el puerto fronterizo de El Paso, Texas, que lo colocan como el segundo puerto de entrada más ocupado por el cruce de vehículos y peatones a lo largo de la frontera México-Estados Unidos (DOT, 2020). En 2019, se realizaron más de 10,6 millones cruces en vehículos de México a Estados Unidos y casi 7,9 millones de peatones cruzaron la frontera a través de los cuatro puentes internacionales principales de la región.
La anterior, dinámica económica y social transfronteriza fue impactada de manera severa a partir del inicio de la pandemia de la Covid-19, como resultado del cierre de la frontera entre México y Estados Unidos a partir del 21 de marzo de 2020, para viajes que no se consideran esenciales, entre los que destacan los turísticos. Lo que significó, que los ciudadanos mexicanos con visa de turista no pueden cruzar a Estados Unidos. De lo anterior, se destaca el impacto económico en algunos sectores de la economía de El Paso, pero sobre todo en los residentes mexicanos que hacían compras en ambos lados de la frontera, con el fin de maximizar sus ingresos o revendían productos comprados en Estados Unidos para así obtener ingresos adicionales.
En este sentido la Encuesta Transfronteriza para Usuarios de Puentes Internacionales entre Ciudad Juárez, Chihuahua y El Paso, Texas, realizada por El Colef a solicitud del Departamento de Puentes Internacionales de la ciudad de El Paso, Texas, ofrece una amplia información al respecto. La encuesta se concentró en recabar información sobre el perfil demográfico de los usuarios de los cruces fronterizos, razones por la que cruzan la frontera y el gasto que realizan por sector económico, tanto los residentes de México en El Paso, como los residentes de EE.UU en Ciudad Juárez. Debido a que el levantamiento de la encuesta se realizó de mantera continua durante 5 meses antes del inicio de la pandemia del Covid-19, las estimaciones del gasto permiten evaluar de manera parcial el impacto económico del cierre de la frontera en los diferentes sectores económicos de ambas ciudades.
Los resultados muestran que las principales razones de los usuarios de puentes internacionales residentes en México para cruzar la frontera son; para realizar compras al menudeo (40,7%), seguidas de visita a familiares y amigos (25,4%), trabajo (20%) y actividades relacionadas con la escuela (5,5%). Por su parte, los residentes en EE.UU. que cruzan a México lo hacen principalmente para hacer compras (14,9%), asistir a restaurantes o bares (4,7%), asistir a servicios médicos y otros servicios (8,1%), actividades sociales con familiares (55,7%) y en menor medida a llevar a cabo actividades laborales (9%).
Las estimaciones realizadas con base en la encuesta permiten identificar que el 87% del total del gasto de los residentes en México que cruzan a Estados Unido se realiza en el sector de comercio minorista, contra el 48% de los residentes de EE.UU. que hacen en Ciudad Juárez. De hecho, se estima que los residentes en México gastaron en el periodo de 5 meses del levantamiento de la encuesta, en el sector de comercio minorista 226,7 millones de dólares, frente a 118,8 millones de dólares que realizaron en México los residentes en Estados Unidos. Por el contrario, los residentes de EUA. gastaron más de cuatro veces en servicios que sus mexicanos contrapartes, principalmente en restaurantes (43,1 millones de dólares) y en visitas relacionadas con servicios médicos (38,6 millones de dólares).
Por lo anterior, los impactos económicos por el cierre de la frontera para viajes no esenciales se concentran principalmente en el lado estadounidense de la frontera, en donde el grueso de los residentes mexicanos que realizan compras al menudeo no pueden cruzar la frontera. En contraste, los sectores de servicios de salud del lado mexicano también han sido impactados, que, aunque los ciudadanos o residentes en Estados Unidos si pueden cruzar la frontera, aunque no lo hacen con la misma frecuencia ante el temor a un contagio de la Covid-19. El regreso a la ¨normalidad¨ está inevitablemente estará ligada a la existencia de una vacuna contra el virus SARS-CoV 2, que está programada para distribuirse de manera masiva a partir de mediados del año 2021.
Dr. César M. Fuentes Flores
El Colegio de la Frontera Norte